jueves, 29 de enero de 2015

Aparador con muebles reciclados

 

Hoy vamos a ver la transformación de un mueble de melamina en color sapely y un zapatero de roble en un aparador de cocina.

El mueble bajo de melamina sapely fue ideado para ser la base de un acuario, y al ser de base sólida se quiso aprovechar para otro uso. Para la parte superior se utilizó un zapatero de madera de roble, al que se le habían roto las puertas abatibles (por desgracia no tenemos fotos de como estaba antes). Esas puertas se cortaron y han sido acopladas como baldas para la parte superior del aparador.

Para unificar el conjunto la opción fue dar un color blanco a todo el conjunto del mueble, ya que los otros muebles de la cocina son de ese color. Y además debemos recordar que el color blanco visualmente da más amplitud y no ahoga el espacio.

El cambio fue rápido y muy sencillo. La ventaja de trabajar con melamina es que no hace falta un lijado previo. Simplemente se debe jabonar para eliminar posibles restos de grasa o limpiadores que hayan contenido siliconas. Únicamente es conveniente lijar entre mano y mano de pintura, de forma suave, para que la superficie quede fina.

Teniendo en cuenta estas recomendaciones, tan sólo debes aplicar una base o imprimación multiadherente blanca, y un acabado en laca satinada blanca, en este caso ambos son productos al agua. Aquí hemos aplicado dos manos de cada producto, en capa fina, para que quede perfectamente cubierto el color original.

El resultado, como podéis ver, es un precioso mueble aparador totalmente nuevo. La parte superior, al ser de madera de roble, hubo que lijarla al inicio del trabajo, para afinar y quitar un poco el barniz que le recubría.

Es un trabajo muy sencillo, y tiene la ventaja de que al trabajar con productos al agua, no se desprenden olores y puedes trabajar dentro de casa, y el secado es más rápido. Espero que os haya gustado y os animéis a reciclar muebles.