Algunos me habéis preguntado cómo se puede conseguir realizar una
imitación a la madera con pintura, y que sea sencilla de hacer. Esta técnica pictórica se puede realizar sobre cualquier tipo de superficie, ya sea sobre una pared, una puerta metálica, o una superficie de aglomerado.
Ahora disponemos en el mercado de pinturas que prácticamente ellas mismas te dan la apariencia de la madera, siempre dentro de los tonos naturales de la madera (roble, nogal, caoba, cerezo...). Son
lacas satinadas bastantes cubrientes, pero es conveniente que antes de aplicarlas fondees la superficie con una imprimación mate coloreada bien con colorante ocre, en el caso de la imitación a maderas claras, o con un tono rojo inglés, en el caso de las maderas rojizas.
Una vez seca la base, aplica la pintura efecto madera en forma de zeta, y con una paletina plana extiende la pintura en dirección al veteado que quieras formar (horizontal o vertical). Seguidamente, con
la paletina (o brecha plana) bastante seca, vuelve a peinar toda la superficie para marcar más la veta de la falsa madera. También puedes dentar la paletina para remarcar más las vetas.
Hace años, para realizar las veladuras o vetas de la madera se empleaban
tierras (siena natural, mazarrón y sombra tostada), éstas se pueden sustituir por
óleos, que al igual que las tierras se diluyen en aceite de linaza y aguarrás. La preparación de la superficie sería de la misma forma que os he comentado anteriormente (fondo más colorante), y la realización de la veladura puedes realizarla ayudado por un
taco veteador con
peine para resaltar las vetas. También puedes ayudarte con
"el pulgar"para hacer los nudos, y con un pincel fino e incluso "la uña" realizar las fugas o líneas de la madera.
Los tacos de caucho para vetear tienen por un lado la forma de nudo, y por el otro lado un peine para formar las vetas. También existen
peines de acero para vetear, y paletinas con las cerdas separadas
"perrillos", para ayudarte a hacer las vetas.
La imitación a madera también la podemos realizar con colores vivos, sobre todo cuando va destinada a una habitación infantil, donde podemos sustituir los típicos tonos de la madera por colores más alegres (rosa, azul, verde, violeta). Para ello, aplicaremos un tono suave de fondo y marcaremos la veta con una
laca sintética diluida en un tono más fuerte dentro de la misma gama de color que hayamos elegido.